El porrazo

¡¡Panfilón!! ¡¡Alharaco!!"
- "Insultos" de un pasajero a otro
Ya se está volviendo costumbre. Los lunes me junto con la Carla y en vez de ir al cine, vamos a hacer trámites -manso panorama xD- al centro de Santiago. Veníamos de la tanda bancaria -girar plata, depositar plata, pagar hosting de ChileD2k, pedir claves, etcétera- en una 210, camino a que la Carla se matriculara cuando una pareja de edad toca el timbre pasado La Moneda...

Por la 3ª puerta se baja la señora sin problemas, pero el caballero iba pajareando y no le achuntó a la vereda, mandándose el manso porrazo. El caballero, enchuchado se pone de pie y comienza a golpear la micro, puteando al chofer, y lo va a encarar adelante.

Mientras tanto, el chofer no le daba bola. Seguramente, como buen chofer de Transantiago, es inmune a las chuchadas de la gente. Lamentablemente, esto enfureció más al caballero, que no encontró mejor idea que pararse en medio de la Alameda, frente a la micro, para que ésta no pudiera salir.

Ante todo este alboroto, los carabineros que custodiaban el Ministerio de Educación ante una insípida protesta -8 ó 9 personas gritando con un cartel- por el Pase Escolar decidieron meter su cuchara y ponerle la fianza al caballero. Ante ésto, los pasajeros reaccionaron -ya estaban picados porque el caballero no dejabaque la micro avanzara- y partieron a prestarle ropa al chofer, formándose una discusión que inexplicablemente se alejaba cada vez más de la micro.

Lo gracioso ocurrió dentro de la micro. La gente que no se bajó a apoyar al chofer, igual lo apoyó a la distancia... o, al menos, se preocupó de dejar caer su arsenal de insultos sobre el caballero que ocasionó todo el problema. De todos esos insultos, hubo un par que me llamó la atención. "¡¡Panfilón!! ¡¡Alharaco!!" gritaba uno de creativos los pasajeros, despertando la risa de los estresados viajantes.

Finalmente, partearon al chofer, empapelaron a chuchadas a los pacos y al viejo que se cayó, y con la Carla descubrimos que ahí donde estuvimos parados como media hora era donde nos teníamos que bajar... así que nos pasamos de largo =P.

Chau Chau
(H)

¿Más caro o más barato?

Es paradójico. Es claramente más barato el Transantiago que el sistema anterior -las micros amarillas- ya que puedes llegar a cualquier parte de Santiago con los mismos $380 -$130 para los escolares hasta hace poco-, mientras que en el antigo sistema eran menos los lugares a los que podíai llegar con una sola micro, y a veces había que tomar 2 -y pagar $760- para los viajes largos.

Pero no sé por qué uno siente que gasta más plata con este sistema...

¿Será que el hecho de darse cuenta del gasto real que se hace en transporte hace que duela más? Uno con la bip! sabe claramente cuánto es lo que gasta en micro en un período de tiempo, lo que lo hace doloroso. Probablemente, uno antes ni se fijaba en éso.

¿Será que el hecho de que haya que cargar a tarjeta con billetes nos duela más? Porque antes uno juntaba las chauchas que tenía y generalmente le alcanzaban para la micro. Ahora hay que desembolsar billetes para andar en micro.

No sé. Ahora que no puedo pagar escolar -Gobierno mentiroso- me doy cuenta más aún del gasto que implica andar en micro, antes no me preocupaba tanto. Lo que sí sé es que tengo ganas de salir y no sé si podré hacer todas las cosas que quiero hacer porque la plata no abunda.

Chau Chau
(H)

PD: También aprovecho este espacio para despedir al gran Sergio Riquelme Pinna, ex-rector del Instituto Nacional, que ayer dejó este mundo. ¡¡Grande, Tomatín!!

Flaaaites

"Muchos nos dieron las gracias por el campeonato, que los hacíamos felices pese a estar detenidos. Tenemos muchos colocolinos detenidos. Si estuvieran afuera, llenaríamos más los estadios."
- Claudio Borghi en El Mercurio
Sé que uno le dice flaites a los del Colo sin razón de peso, porque Los De Abajo son tan flaites como la Garra Blanca y porque nunca se podrá tener un Lomitón en el Nacional o en el Monumental, a diferencia de San Carlos de Apoquindo... o al menos éso creía yo...

Años yendo a la Galería Sur a ver a la U, y nunca jamás vi a nadie fumando pasta. El otro día fui a la Noche Alba y estuve en Caupolican -lo que sería la puerta 11 en el Estadio Nacional... Julio Martínez Asdasdasd- donde entraban las escuelas de fútbol con sus familias y todo, y estaban varios locos fumando pasta ahí mismo, con cabros chicos alrededor, con Pedro Reyes -que seguramente nunca lo vio, porque tenía una avalancha de hinchas encima pidiéndole autógrafos- y con quién les escribe, ahí en medio de todos.

No les miento, pasé toda la Noche Alba pensando en este blog, pensando en qué iba a poner en esta entrada. Pero los refuerzos fueron charchas, así que sólo alcanzó para una foto en el fotolog. Recién hoy, días después, me di cuenta de la relevancia del tema.

Es que no puede estar tan mal la gente colocolina. Onda, si ésa era la parte familiar del estadio -al menos, éso decía en toda esa parte del estadio-, me pregunto cómo chucha será en la Garra Blanca... ¿Estarán inyectándose heroína ahí? Quizás qué drogas se ingieren ahí, donde se supone que están los verdaderos flaites...

Chau Chau
(H)

PD: Tenía caleta de ideas para mi entrada de la Noche Alba, pero ninguna me agradó lo suficiente...
PD2: No puedo dejar de mencionar el quote a Claudio Borghi en EMOL, que leí hoy en el blog de Charla Técnica.

Confesión

Mi papá y su familia son todos del Colo. Mi mamá y toda su familia son de la U. Y yo estaba al medio, el primer hijo, y salí varón -un poco fino, pero varón (8).

Como es costumbre, es el papá el que le muestra el fútbol al cabro chico, y mi caso no fue la excepción. Así que mis primeros años de vida fui del Colo =O. Fueron 5 años, si no me falla la memoria.

Sin embargo, luego apareció la familia de mi mamá: Los Zárate Sánchez -mis padrinos y sus hijos, a los que les digo "primos"-, que son una familia completamente devota a la U. Con ellos comencé a pasar cada vez más tiempo, y como uno es súper permeable a esa edad, empecé a impregnarme de la mística azul que hoy empapa mi corazón.

Y así comenzó la confusión. Como buen cabro chico, siempre jugaba a la pelota, a veces solo, en el antejardín y hacía partidos entre los pocos equipos que conocía -recuerden que tenía 5 años xD. En el momento más crítico de la confusión, recuerdo que jugaba partidos entre el Colo y la U y los hacía empatar, porque no sabía qué equipo me gustaba más.

Finalmente, triunfó la U. Creo, objetivamente, que fue por mis primos. No conocía a nadie del Colo de mi edad que fuera influyente para mí, y de la U estaban ellos.

Igual, no me arrepiento para nada. Creo que la U es una institución que me representa. No, más que la institución, es la gente que es de la U. Me siento identificado con ellos. A pesar de que no tenemos las copas que tiene Colo-Colo, la lealtad y aguante a prueba de balas que tiene la gente de la U me llena de orgullo y hace que me motive para aquellas tareas que a veces parecen imposibles, para dar ese 110% del que siempre se habla...

Chau Chau
(H)

PD: Es tarde. No sé si tiene coherencia o cosas así, sólo escribí xP.